Parece que la actriz Melanie Griffith está bebiendo en exceso, y su marido el guapísimo Antonio Banderas le dió el ultimátum para que se recupere de sus adicciones en una clínica.
Por esta razón la actriz debió internarse en una clínica de rehabilitación porque Antonio le dijo que se mantuviera limpia y sobria. Le comentó que si no cambiaba de actitud su matrimonio se terminaría.
Esta es la segunda recaída de Melanie, quién le agradeció a su esposo la ayuda que estaba recibiendo por parte de él, y comentó que superar este problema es muy duro pero será facil porque tienes ayuda de su familia.
Otra fuente aseguró que la actriz moriría sin Antonio.